El objetivo que persigue en la actualidad el sector energético, es abaratar los costes de los materiales superconductores. Estos materiales son aquellos que con algunas condiciones determinadas, conducen la corriente eléctrica sin resistencia ni pérdida de energía. Este es un aspecto clave para convertirlos en idóneos para el sector energético.
Desde hace años se lleva a cabo un proyecto europeo para obtener materiales superconductores más baratos. Está financiado por la Unión Europea, y en él trabajan diversas universidades, centros de investigación y empresas.
Después de varios años de investigar en la materia, parece que han dado con un sistema capaz de producir cintas superconductoras, con un coste de producción mucho menos elevado, lo que sería una auténtica revolución en la producción de energías renovables a largo plazo. Han conseguido crear una cinta superconductora de alrededor de 600 metros, con unos costes de producción muy por debajo de los habituales. Esto ha sido posible gracias a la utilización de óxido de cobre, que conduce cien veces más electricidad que el cobre.
Este nuevo hilo permite crear cables para transportar la electricidad sin pérdidas de energía, lo que hace que tenga 5 veces su potencia normal. También permite general campos magnéticos mucho más intensos. De cara al futuro, los expertos en energías renovables, piensan que también podría beneficiar a la energía eólica, haciendo unos generadores más potentes. La aviación también podría beneficiarse de este nuevo material, pues se podría hacer aviones eléctricos mucho más ligeros.
Las energías renovables son esenciales para cuidar el medio ambiente, ya que no producen gases de efecto invernadero, que son los causantes del cambio climático y parte de la contaminación. Estas energías son limpias e inagotables, y además cada vez sus costes son más bajos. Se consideran energías renovables la energía solar, la eólica, la geotérmica, la hidráulica y la eléctrica. También pueden incluirse en este grupo la biomasa y la energía mareomotriz.
Según las estadísticas de la Agencia Internacional de la Energía (AIE), las energías renovables no dejan de crecer, actualmente representan la segunda fuente global de electricidad, solo superadas por el carbón. Durante el año 2015 se experimentó el mayor aumento a nivel mundial en uso de energías renovables. Poco a poco se van instalando más placas solares, aerogeneradores o construyendo centrales hidroeléctricas, por lo que cada vez se van a convertir en las más utilizadas. Desde luego son la mejor apuesta para ahorrar y para cuidar el medio ambiente.