En este post queremos darte una serie de consejos con los que mediante pequeñas acciones podrás abaratar una cantidad importante de energía y de dinero. Y es que con la llegada del invierno y del frío se encienden las calefacciones por lo que la factura del gas aumenta. Sin embargo, mediante pequeñas acciones se puede conseguir ahorrar una cantidad importante de energía que se reflejará en nuestra factura del gas. Además, el pasado 21 de octubre fue el Día Mundial del Ahorro Energético, por lo queremos darte varios consejos básicos y sencillos que te permitan ahorrar en la factura.
Empezaremos hablando de la caldera y del buen mantenimiento de una caldera, y es que es esencial. Desde aquí te queremos recomendar que tengas un contrato de mantenimiento periódico, que compruebe el buen funcionamiento de la caldera con el paso del tiempo. Por otro lado, tienes que tener en cuenta que la legislación obliga a hacer revisiones en la caldera. Si tu caldera dispone de más de 70 kW de potencia, deberás revisarla cada año. Si por el contrario, tiene hasta 70kW, los más comunes en España, deberá ser revisada cada dos años. Con los calentadores ocurre algo parecido, si tiene una potencia superior a 24,4 kW, deberá pasar por una revisión cada dos años. Si por el contrario es de hasta 24,4 kW, los más comunes en el país, deberá ser revisado cada cinco años.
Otro factor a tener en cuenta es la regulación de la temperatura en nuestra casa, ya que aunque el tiempo en el exterior sea frío y se disponga de un buen sistema de calefacción, es indispensable regular la temperatura para no pasarse con el calor. La temperatura recomendada oscila entre los 20 y los 21 grados durante el día y los 16 y los 18 grados durante la noche. En el caso de disponer de calefacción individual, es aconsejable utilizar un sistema de regulación de temperatura mediante termostato. Por cada grado que no subas en tu termostato, ahorrarás entre un 5 y un 8 por ciento de energía.
También hay que tener cuidado a la hora de ventilar la casa y es que no puedes olvidarte de cerrarlas ya que hará subir de forma notable la factura a final de mes. También es recomendable, para evitar que tu casa esté más fría de lo normal y tengas que recurrir a un exceso de energía para mantenerla confortable, aislarla bien del exterior. Esto puedes hacerlos poniendo doble cristal en las ventanas, que deberán disponer además de un cierre hermético, o aprovechando las entradas de luz solar, levantando las persianas. Si tienes que cambiar un electrodoméstico busca que su clasificación energética sea de A. Lavar los platos en el lavavajillas ahorra más que hacerlo a mano con agua caliente. También es importante instalar una llave con termostato en la ducha, para obtener de forma constante el agua a la temperatura deseada. Ayuda al planeta y a tu bolsillo con el ahorro energético.